viernes, 13 de agosto de 2010

Utopìa


Quiero un despertar lento y suave de sàbanas que acaricien. Un buen dìa lleno de augurios y positivìsmo, luego de un sueño reparador y nocturno. Una mañana sin horarios y sin prisa, en dònde suene el telèfono, tan solo para comunicar nuevas alegrìas. Enterarme por las noticias que los hombres dejaron de fabricar armas, que las organizaciones terroristas dejaron de existir como tales, y que por lo tanto han dejado de usarlas. Que la fabricaciòn de drogas, solo serà utilizada para la curaciòn de enfermos; y que todas ellas "armas y drogas" seràn quemadas en una hoguera universal. Que seràn abolidas varias costumbres "humanas". Guerrear, torturar y el hambrear principalmente, entre muchas otras. El poder capital, religioso y polìtico, el papado, el rabinato, y todas las clases representativas de nuestras sociedades. Islamistas, islamofascistas, fascistas, marxistas, màs todos los "istas" y los que no lo son, se han unido; tan solo por la salvaciòn de la especie humana, animal y su habitats.`¡ Es que el mundo se nos va al carajooo! ¡Marchan todos juntos por amor universal! ¡Salvemos el mundo, salvemos el amor! Que se clausure la negatividad. Que las palabras, intereses, manipulaciòn y guerra se borren del diccionario.Que la gente se frecuente y se busque tan solo por el deseo de compartir, y no por bajos intereces mezquinos. Y el buen dìa cargado de presàgios con una sonrisa franca, haga su apariciòn. Es que yo tengo mi propio sentido utòpico, serìa todo tan simple. ¡Pero el amor universal es cosa de almas grandes! Tan solo estos cambios quiero y parece que pedì demasiado... Pero aprendì que para pedir, ¡hay que pedir a lo grande!

Gladys Goldszteyn.